La semana pasada, aprovechando la festividad del Corpus, decidimos ir a cenar a uno de los mexicanos con más alcurnia de la ciudad de Granada: El Delirio.
Con un ambiente acogedor y relajante y una decoración original a la vez que sencilla, el local prepara al comensal para la explosión de sabores que le espera.
Para abrir boca empezamos tomándonos una cerveza, acompañada de su correspondiente tapa. En esta ocasión, unas fajitas deliciosas que nos abrieron el apetito y nos hicieron sumergirnos en la carta sin perder un segundo.
Tras barajar las diversas opciones que ofrece el local, apostamos por compartir unos "alambres". Este plato (que hizo las delicias de ambos) está compuesto de verduras asadas (champiñón, calabacín, cebolla y berenjena) acompañadas de pollo y chorizo criollo y todo ello cubierto de mozzarella fundida. Además lo sirven con unas tortitas de trigo para que el que quiera se lo coma como un taco.
Todavía con el increíble sabor de boca de los alambres queríamos poner la guinda al pastel con un buen postre, y lo conseguimos. Pedimos unos nachos dulces, consistentes en unos nachos rebozados de canela y acompañados de helado de chocolate y sirope de nata y chocolate. Si ya se nos había quedado buen sabor de boca con los alambres, los nachos dulces fueron el colofón perfecto.
Si sois aficionados a la comida mexicana y apreciáis la originalidad de los platos, ¡no podéis dejar de pasaros!
Gastro, travels & co❤
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